Una reflexión muy corta y muuuuuuy potente. Justo me encuentro en este proceso de “adaptación” de I3 y me ha gustado mucho el planteamiento. Nosotras tenemos la suerte de trabajar en una escuela pequeña y respetamos mucho el desarrollo de los niños, el tiempo, el espacio… Esta semana, por ejemplo, hemos echo actividades en el patio para dar la bienvenida, para que cada alumn@ busque con aquello que esté más cómodo, respetando los tiempos, observando, etc. Tenemos la suerte de tener “Lentitud”, como ya se ha comentado en otros foros. Aún así, las maestras siempre necesitamos tener una mochila bien grande de recursos para poder adaptarnos NOSOTRAS a nuestros alumn@s.
Por suerte, ahora ya hay bastantes centros donde se está cambiando la forma de trabajar. Pero aún queda mucho camino, nos falta mirar más a los niños , quitarle “poder” al adulto y dárselo a ell@s.
Sobre lo que comenta Paula de los coles, yo creo que para flexibilizar con el alumnado hay que hacer un trabajo basado en la imaginación y en la creatividad (con mucha formación previa, claro) y eso consume más energía que un trabajo estandarizado, repetitivo y automático, aunque el primero aporte otro tipo de compensaciones, claro. Por eso, entre otras cosas, es que en los coles nos encontramos, mayoritariamente, lo que nos encontramos.
Este es el pensamiento que he escuchamos habitualmente pero yo no creo que sea así. Por supuesto que hacer otro tipo de actividades, nos implican el conseguir los materiales, el diseño, el montaje, etc. pero hay muchas cosas que se pueden hacer que no consumen tantos recursos ni económicos, de tiempo y energía y la diferencia es enorme. El tema es que es mucho más cansado y mucho más agotador, pasarse una mañana riñendo, controlando, “poniendo orden”, trabajando con niñ@s desmotivados, aburridos. Eso sí que consume una energía enorme. Trabajar con otras estrategias, otros materiales y otras posibilidades en realidad es mucho más sencillo. Yo a veces veo a maestras en un día habitual y no entiendo cómo consiguen sobrellevarlo. Yo no podría. Así que esa idea de “es más fácil” quizás tendríamos que empezar a ponerla en cuestión. Para mi personalmente, es mucho más fácil trabajar como lo hago.
Pues cómo me gusta escucharte. A mi hija también le costó mucho empezar a los 3 años. Lo recuerdo como un periodo muy complicado para toda la familia. Incluso, planteamos la posibilidad de no llevarla…
Hoy en día aunque le gusta ir a la escuela, siento que como bien dices, no se llevan a la práctica diferentes formas de experimentación con el grupo. Es siempre lo mismo, cada día lo mismo, cada semana y cada mes. Con la única diferencia de cambio de estación, fiestas populares o clima…
¿Por qué tenemos que pedirle a los niños que se adapten a una forma determinada? la del profesor o la de compañeros con un perfil determinado. Sinceramente, me parece ya no solo inadecuado sino simplista y poco educativo.
Y muchas veces es por falta de flexibilidad, por no ser capaz de seguir otras miradas, por no atreverse.
¡Gracias por el vídeo!
Creo que la adaptación es un momento de crecimiento y es necesario adaptarse, tanto para nuestros niños y niñas como para nosotros mismos, también nos estamos adaptando con cada nuevo grupo, o cada nueva información que nos llega y nos hace replantearnos cosas y modificar nuestras propuestas. El problema creo yo aparece cuando con el término adaptación, no se busca crecimiento sino sumisión y aceptación de algo impuesto. Cuando las maneras de hacer, decir, actuar…….no contemplan las necesidades de tod@s los que allí habitan.
Siguiendo a Ken Robinson me gustaría destacar la idea de que educamos a los niños para el futuro y sin embargo no sabemos cómo va a ser el futuro que vivan nuestros niños/as. La situación que estamos viviendo creo que ha puesto en evidencia todo este tipo de cosas y los niños una vez más nos han dado una lección, han sido capaces de adaptarse, seguro muchos de ellos habrán descubierto talentos que en el día a día quedan en el olvido porque nuestro ritmo de vida no siempre nos permite pararnos
En cuanto al tema de la adaptación creo que es un ejercicio pendiente deberíamos trabajar en esa línea y ser los adultos, el sistema el que se adapta y no al contrario
De este aspecto me parece fundamental hacer hincapié en el equipo docente, ya que distintas personas que lo conforman son distintos puntos de vista que se complementan y se ayudan a conformar una guía o una manera de seguir más diversa y variada. Más ideas y opiniones distintas nos nutren de más variedad de estrategias, adaptaciones y experiencias.
Efectivamente. De esas diversidad también en los equipos y de la posibilidad de entender las diferencias como complementarias en vez de como oposiciones hablo en la lección dedicadas a los “binomios fantásticos”.
Definitivamente esa falta de flexibilidad, se ve muy reflejado en el diseño de los espacios y en el tipo de materiales que les brindamos a los niños y niñas. Porque en la teoría podemos conocer y saber de memorias estos principios, incluso compartir estás ideas pero nuestros espacios educativos y sociales reflejar otra cosa.
Creo que fue John Holt quien escribió sobre cómo los alumnos se adaptaban a la enseñanza, no para aprender por el gusto de aprender, sino para aprender, qué necesitaba cada profesor de ellos, y en función de eso comportarse. Me pareció una idea brutal, ese gasto de energía para algo tan improductivo. Sé tu mismo, y aprende como necesites. Estoy desaprendiendo para llenar mi caja de estas pequeñas y grandes herramientas. Creo que no hace falta saltase la ley, a veces es solo saber interpretarla mejor, y traducirla a los ojos del sistema, porque su mirada es muy reducida.
Las leyes precisamente en muchos casos nos aparan en el respeto a la diversidad. Hay muchas cosas que ya están escritas en papel y son ley y podemos recurrir a ellas para sostener nuestras prácticas. En ningún caso hablamos de no respetar la leyes, pero como comentas dejan mucho margen de maniobra. También los contenidos establecidos se pueden adaptar de muchas maneras diferentes y ya es algo que muchos centros hacen para cumplir con las programaciones que les solicitan, de una forma acorde a sus principios educativos.
He leído ha Robinson pero no conocía estos tres elementos, me ha encantado la reflexión y comparto la opinión en que debe ser el sistema y las metodologías las que se adapten a los alumn@s, la educación no (no vale cualquier tipo), sino una buena educación en todos los sentidos , con amor, respeto y alegría , debe poder llegar a todos.
Totalmente de acuerdo en que en sistema esta fallido, obsoleto o como se le quiera llamar, lo que esta claro es que no funciona como debiera porque muchos niñ@s se quedan fuera del. Totalmente de acuerdo en que a los profesionales de la educación nos hacen falta muchas estrategias, muchísimos mas recursos, esa caja de herramientas de la que hablas…. hay que llenarla mas porque cuanto mas llena, mas opciones, pero no mas opciones de hacer lo que se nos pide, sino mas opciones de “hacer la trampa”. Somos peones con una responsabilidad infinita y una fama horrible, vivimos desacreditados continuamente, con cero de reconocimiento social e institucional. Nosotros somos unos mandados. Nuestros jefes son políticos con ninguna idea de educación, que crearon un sistema del que solo se acuerdan cuando hay que hacer recortes o exigir algo a los maestros. En el aula no se hace lo que el maestro quiere y creo que eso es algo que no se sabe o a la gente se le olvida. Los maestros hacemos magia y malabares para cumplir con el currículo que se nos impone (aunque no estemos de acuerdo con el) a veces incluso con la metodología que se considera necesaria para cumplir sus exigencias (atados de pies y manos) Y pese a todo, aquí estamos formandonos para seguir en la lucha y dentro de lo posible meter todas las modificaciones que consideramos son imprescindibles dentro de nuestras aulas y dentro de nuestro sistema educativo, llenando nuestra caja de herramientas porque la ley ya la tenemos y a nosotros nos toca hacer la trampa.
Creo que siempre tenemos la oportunidad de entender una realidad compleja desde muy diferentes puntos de vista. Yo creo en poner la mirad en todo lo que tenemos la oportunidad de cambiar, en todo lo que sí podemos hacer, en todo aquello para lo que sí tenemos margen. Y creo que es mucho y que somos muchas las personas que trabajamos por ello, que generamos redes, que nos ayudamos mutuamente. Creo que es importante hacer un análisis de la realidad que enfrentamos pero siempre desde un lugar de optimismo. Lo desarrollo un poco más adelante en este curso de introducción.
Acrescento ainda que não posso levar a criança apenas a seguir a minha planificação, mas antes, devo ser eu a acompanhar/observar os seus interesses e estar atenta para neles colocar as minhas intenções pedagógicas.
Como educadora, considero-me apenas uma orientadora/facilitadora da aprendizagem, pois quem conduz o seu projeto é a criança. Estou presente para fazer parte do seu processo de construção e devo relacionar-me com ela, mas respeitando o seu tempo. Todas as crianças são diferentes e temos de respeitar a individualidade de cada um.
Totalmente de acuerdo con la necesidad de que el sistema sea flexible y dinámico para adaptarse a las necesidades cambiantes de los alumnos y alumnas.
Los niños y niñas viven el AQUÍ y AHORA y los adultos nos olvidamos de eso. Ha y que confiar más y quitar miedos e inseguridades.
Creo que el dar la vuelta a la mirada y entender que la escuela debe adaptarse a los niños y no al revés es justamente la idea central de este nuevo paradigma de educación.
Estoy ahora leyendo un libro (“Reflections on the Reggio Emilia Approach”) y uno de los consejos que proponen para iniciar el cambio es realizar las mismas actividades que ya hacíamos pero de otra manera: escuchando, documentando, reflexionando.
“El que nunca hace nada nuevo o diferente, nunca se equivoca” equivocarse esta bien, significa que lo estas intentando y que estas aprendiendo de tus errores.
Cambiar el foco de la mirada…
Esto que dices me ha recordado algo que escribí hace unos meses: “La creatividad y el miedo están interconectados porque hacer algo realmente nuevo en nuestras vidas implica abordar lo desconocido, un lugar donde nuestra sensación de control deja paso a la incertidumbre. Cuando emprendemos algo nuevo podemos sentir en algunos momentos que nos quedamos sin suelo bajo los pies, enfrentar nuestras inseguridades puede ser un proceso aterrador. ¿Por qué lo hacemos entonces? Elizabeth Gilbert dice que para llevar una vida creativa es necesario tener una pizca de curiosidad más que de miedo. Ello no elimina la incertidumbre, ni el miedo, pero nos empuja a la acción a pesar de todo.”
Es muy interesante sentir como nos inquieta la calidad de lo que ofrecemos a la infancia y adolescencia. Es importante esa reflexión de la que hablaba Irene sobre lo que hacemos. Nuestros esfuerzos solo valdrán la pena si consideramos en primer lugar lo que ellos y ellas nos piden… incluso los que no tienen palabras todavía, porque son capaces de explicarnos sus necesidades y expresarnos que ellos y ellas tienen mucho que decir…. y entonces caminaremos de la mano y seremos verdaderamente útiles para su bienestar y crecimiento. Aprender a observar y tener una escucha atenta creo que son esas estrategias fundamentales para transformar la escuela.
Desde nuestros potenciales, como decía Irene, podremos aportar mucho más que estando encorsetados dentro de un curriculum.
Una reflexión muy corta y muuuuuuy potente. Justo me encuentro en este proceso de “adaptación” de I3 y me ha gustado mucho el planteamiento. Nosotras tenemos la suerte de trabajar en una escuela pequeña y respetamos mucho el desarrollo de los niños, el tiempo, el espacio… Esta semana, por ejemplo, hemos echo actividades en el patio para dar la bienvenida, para que cada alumn@ busque con aquello que esté más cómodo, respetando los tiempos, observando, etc. Tenemos la suerte de tener “Lentitud”, como ya se ha comentado en otros foros. Aún así, las maestras siempre necesitamos tener una mochila bien grande de recursos para poder adaptarnos NOSOTRAS a nuestros alumn@s.
Por suerte, ahora ya hay bastantes centros donde se está cambiando la forma de trabajar. Pero aún queda mucho camino, nos falta mirar más a los niños , quitarle “poder” al adulto y dárselo a ell@s.
Sí, hay muchísimos cambios y multitud de proyectos interesantes en todo el mundo.
Sobre lo que comenta Paula de los coles, yo creo que para flexibilizar con el alumnado hay que hacer un trabajo basado en la imaginación y en la creatividad (con mucha formación previa, claro) y eso consume más energía que un trabajo estandarizado, repetitivo y automático, aunque el primero aporte otro tipo de compensaciones, claro. Por eso, entre otras cosas, es que en los coles nos encontramos, mayoritariamente, lo que nos encontramos.
Este es el pensamiento que he escuchamos habitualmente pero yo no creo que sea así. Por supuesto que hacer otro tipo de actividades, nos implican el conseguir los materiales, el diseño, el montaje, etc. pero hay muchas cosas que se pueden hacer que no consumen tantos recursos ni económicos, de tiempo y energía y la diferencia es enorme. El tema es que es mucho más cansado y mucho más agotador, pasarse una mañana riñendo, controlando, “poniendo orden”, trabajando con niñ@s desmotivados, aburridos. Eso sí que consume una energía enorme. Trabajar con otras estrategias, otros materiales y otras posibilidades en realidad es mucho más sencillo. Yo a veces veo a maestras en un día habitual y no entiendo cómo consiguen sobrellevarlo. Yo no podría. Así que esa idea de “es más fácil” quizás tendríamos que empezar a ponerla en cuestión. Para mi personalmente, es mucho más fácil trabajar como lo hago.
Pues cómo me gusta escucharte. A mi hija también le costó mucho empezar a los 3 años. Lo recuerdo como un periodo muy complicado para toda la familia. Incluso, planteamos la posibilidad de no llevarla…
Hoy en día aunque le gusta ir a la escuela, siento que como bien dices, no se llevan a la práctica diferentes formas de experimentación con el grupo. Es siempre lo mismo, cada día lo mismo, cada semana y cada mes. Con la única diferencia de cambio de estación, fiestas populares o clima…
¿Por qué tenemos que pedirle a los niños que se adapten a una forma determinada? la del profesor o la de compañeros con un perfil determinado. Sinceramente, me parece ya no solo inadecuado sino simplista y poco educativo.
Y muchas veces es por falta de flexibilidad, por no ser capaz de seguir otras miradas, por no atreverse.
¡Gracias por el vídeo!
Gracias a ti Paula.
Acompañar sin interferir … Proyectos inclusivos , teniendo en cuenta el proceso de cada uno y ese uno en su conjunto
Creo que la adaptación es un momento de crecimiento y es necesario adaptarse, tanto para nuestros niños y niñas como para nosotros mismos, también nos estamos adaptando con cada nuevo grupo, o cada nueva información que nos llega y nos hace replantearnos cosas y modificar nuestras propuestas. El problema creo yo aparece cuando con el término adaptación, no se busca crecimiento sino sumisión y aceptación de algo impuesto. Cuando las maneras de hacer, decir, actuar…….no contemplan las necesidades de tod@s los que allí habitan.
Siguiendo a Ken Robinson me gustaría destacar la idea de que educamos a los niños para el futuro y sin embargo no sabemos cómo va a ser el futuro que vivan nuestros niños/as. La situación que estamos viviendo creo que ha puesto en evidencia todo este tipo de cosas y los niños una vez más nos han dado una lección, han sido capaces de adaptarse, seguro muchos de ellos habrán descubierto talentos que en el día a día quedan en el olvido porque nuestro ritmo de vida no siempre nos permite pararnos
En cuanto al tema de la adaptación creo que es un ejercicio pendiente deberíamos trabajar en esa línea y ser los adultos, el sistema el que se adapta y no al contrario
De este aspecto me parece fundamental hacer hincapié en el equipo docente, ya que distintas personas que lo conforman son distintos puntos de vista que se complementan y se ayudan a conformar una guía o una manera de seguir más diversa y variada. Más ideas y opiniones distintas nos nutren de más variedad de estrategias, adaptaciones y experiencias.
Efectivamente. De esas diversidad también en los equipos y de la posibilidad de entender las diferencias como complementarias en vez de como oposiciones hablo en la lección dedicadas a los “binomios fantásticos”.
Definitivamente esa falta de flexibilidad, se ve muy reflejado en el diseño de los espacios y en el tipo de materiales que les brindamos a los niños y niñas. Porque en la teoría podemos conocer y saber de memorias estos principios, incluso compartir estás ideas pero nuestros espacios educativos y sociales reflejar otra cosa.
Creo que fue John Holt quien escribió sobre cómo los alumnos se adaptaban a la enseñanza, no para aprender por el gusto de aprender, sino para aprender, qué necesitaba cada profesor de ellos, y en función de eso comportarse. Me pareció una idea brutal, ese gasto de energía para algo tan improductivo. Sé tu mismo, y aprende como necesites. Estoy desaprendiendo para llenar mi caja de estas pequeñas y grandes herramientas. Creo que no hace falta saltase la ley, a veces es solo saber interpretarla mejor, y traducirla a los ojos del sistema, porque su mirada es muy reducida.
Las leyes precisamente en muchos casos nos aparan en el respeto a la diversidad. Hay muchas cosas que ya están escritas en papel y son ley y podemos recurrir a ellas para sostener nuestras prácticas. En ningún caso hablamos de no respetar la leyes, pero como comentas dejan mucho margen de maniobra. También los contenidos establecidos se pueden adaptar de muchas maneras diferentes y ya es algo que muchos centros hacen para cumplir con las programaciones que les solicitan, de una forma acorde a sus principios educativos.
He leído ha Robinson pero no conocía estos tres elementos, me ha encantado la reflexión y comparto la opinión en que debe ser el sistema y las metodologías las que se adapten a los alumn@s, la educación no (no vale cualquier tipo), sino una buena educación en todos los sentidos , con amor, respeto y alegría , debe poder llegar a todos.
Habla de estos tres principios que organizan el sistema educativo tradicional en uno de sus TEDs. De memoria diría que el segundo. 🙂
Totalmente de acuerdo en que en sistema esta fallido, obsoleto o como se le quiera llamar, lo que esta claro es que no funciona como debiera porque muchos niñ@s se quedan fuera del. Totalmente de acuerdo en que a los profesionales de la educación nos hacen falta muchas estrategias, muchísimos mas recursos, esa caja de herramientas de la que hablas…. hay que llenarla mas porque cuanto mas llena, mas opciones, pero no mas opciones de hacer lo que se nos pide, sino mas opciones de “hacer la trampa”. Somos peones con una responsabilidad infinita y una fama horrible, vivimos desacreditados continuamente, con cero de reconocimiento social e institucional. Nosotros somos unos mandados. Nuestros jefes son políticos con ninguna idea de educación, que crearon un sistema del que solo se acuerdan cuando hay que hacer recortes o exigir algo a los maestros. En el aula no se hace lo que el maestro quiere y creo que eso es algo que no se sabe o a la gente se le olvida. Los maestros hacemos magia y malabares para cumplir con el currículo que se nos impone (aunque no estemos de acuerdo con el) a veces incluso con la metodología que se considera necesaria para cumplir sus exigencias (atados de pies y manos) Y pese a todo, aquí estamos formandonos para seguir en la lucha y dentro de lo posible meter todas las modificaciones que consideramos son imprescindibles dentro de nuestras aulas y dentro de nuestro sistema educativo, llenando nuestra caja de herramientas porque la ley ya la tenemos y a nosotros nos toca hacer la trampa.
Creo que siempre tenemos la oportunidad de entender una realidad compleja desde muy diferentes puntos de vista. Yo creo en poner la mirad en todo lo que tenemos la oportunidad de cambiar, en todo lo que sí podemos hacer, en todo aquello para lo que sí tenemos margen. Y creo que es mucho y que somos muchas las personas que trabajamos por ello, que generamos redes, que nos ayudamos mutuamente. Creo que es importante hacer un análisis de la realidad que enfrentamos pero siempre desde un lugar de optimismo. Lo desarrollo un poco más adelante en este curso de introducción.
Acrescento ainda que não posso levar a criança apenas a seguir a minha planificação, mas antes, devo ser eu a acompanhar/observar os seus interesses e estar atenta para neles colocar as minhas intenções pedagógicas.
Como educadora, considero-me apenas uma orientadora/facilitadora da aprendizagem, pois quem conduz o seu projeto é a criança. Estou presente para fazer parte do seu processo de construção e devo relacionar-me com ela, mas respeitando o seu tempo. Todas as crianças são diferentes e temos de respeitar a individualidade de cada um.
Totalmente de acuerdo con la necesidad de que el sistema sea flexible y dinámico para adaptarse a las necesidades cambiantes de los alumnos y alumnas.
Los niños y niñas viven el AQUÍ y AHORA y los adultos nos olvidamos de eso. Ha y que confiar más y quitar miedos e inseguridades.
Creo que el dar la vuelta a la mirada y entender que la escuela debe adaptarse a los niños y no al revés es justamente la idea central de este nuevo paradigma de educación.
Estoy ahora leyendo un libro (“Reflections on the Reggio Emilia Approach”) y uno de los consejos que proponen para iniciar el cambio es realizar las mismas actividades que ya hacíamos pero de otra manera: escuchando, documentando, reflexionando.
“El que nunca hace nada nuevo o diferente, nunca se equivoca” equivocarse esta bien, significa que lo estas intentando y que estas aprendiendo de tus errores.
Cambiar el foco de la mirada…
Esto que dices me ha recordado algo que escribí hace unos meses: “La creatividad y el miedo están interconectados porque hacer algo realmente nuevo en nuestras vidas implica abordar lo desconocido, un lugar donde nuestra sensación de control deja paso a la incertidumbre. Cuando emprendemos algo nuevo podemos sentir en algunos momentos que nos quedamos sin suelo bajo los pies, enfrentar nuestras inseguridades puede ser un proceso aterrador. ¿Por qué lo hacemos entonces? Elizabeth Gilbert dice que para llevar una vida creativa es necesario tener una pizca de curiosidad más que de miedo. Ello no elimina la incertidumbre, ni el miedo, pero nos empuja a la acción a pesar de todo.”
Es muy interesante sentir como nos inquieta la calidad de lo que ofrecemos a la infancia y adolescencia. Es importante esa reflexión de la que hablaba Irene sobre lo que hacemos. Nuestros esfuerzos solo valdrán la pena si consideramos en primer lugar lo que ellos y ellas nos piden… incluso los que no tienen palabras todavía, porque son capaces de explicarnos sus necesidades y expresarnos que ellos y ellas tienen mucho que decir…. y entonces caminaremos de la mano y seremos verdaderamente útiles para su bienestar y crecimiento. Aprender a observar y tener una escucha atenta creo que son esas estrategias fundamentales para transformar la escuela.
Desde nuestros potenciales, como decía Irene, podremos aportar mucho más que estando encorsetados dentro de un curriculum.
dhg